31 enero, 2006

La Matrona

Hoy mi señora tenía su primer control con la matrona que nos va a yudar con el parto de nuestro pekeño bebé. Nos levantamos temprano, ella mas que yo para poder llegar antes de las 9 a la clínica.

Cuando tomamos el metro me puse a pensar que ha pasado el tiempo tan rápido, es como un abrir y cerrar de ojos, es la misma sensación que cuando te casas, estás preocupado de tantas cosas que no disfutas lo esencial y te das cuenta cuando el momento ya pasó. Voy a tratar de disfrutar estos últimos días, hablarle harto a la guatita porque es en estos días donde el bebé asocia todos los ruidos que oye.

Bueno, según la matrona y lo que cree mi señora, mi hijito debería nacer como en 2 o 3 semanas, no queda nada!!!! y hay muchas cosas que aun tenemos que ver. Su cunita es una de las prioridades pero lo hemos dejado para el final porque no queremos cualquier cosa, mas que mal va a ser donde va a pasar la mayor parte del tiempo cuando no esté en mis brazos o en los de mi amorcito.

Deseo tanto que llegue mi hijo, pero creo que aun no estoy preparado, bueno, nunca se está preparado, pero me da un poco de miedo no hacerlo bien. Supongo que me dirán, que si uno se lo propone las cosas no pueden salir mal, cierto?. Bueno, voy a pensar positivamente, cosa que hago muy poco, y hacerme la idea de que mi bebé va a ser muy feliz, con su hermosa madre, su padre medio loko y su perrito que lo va a querer mucho.

1 comentario:

Andrea dijo...

Vamos a ser buenos padres en la medida que podamos darle todo nuestro amor a BB. Sacrificarnos hasta en lo más mínimo por su felicidad y siendo responsables y buenos. Yo no sé la receta mágica pero se que el amor es lo que hace niños y personas felices. Yo sé que ya lo amas, el resto se va viendo en el camino. Lo importante es que nuestro pekeño BB siempre sabrá que es el centro de nuestro universo y un ángel enviado para bendecirnos y enseñarnos muchas cosas.